25 de febrero de 2021
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| Fuente: Google |
Amparada en el artículo 51 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, me dirijo a usted, a través de este medio, para rogarle que se pronuncie, públicamente, sobre el caso del robo al Caney de Carmen y el robo, con uso de Burundanga, a la señora Laura. Ambos locales comerciales (kioscos) están ubicados en la avenida José María Vargas de Santa Fe Norte.
A continuación, los tres post -con todos los detalles de lo sucedido- que publiqué sobre esos casos
1- Robaron en el local de pollos de Carmen en Santa Fe Norte
2- Robo, con Burundanga, en el kiosco de Laura
3- La otra cara del delito es la victimología y la impunidad
Señor, Alcalde, nos sentimos desamparados ante los dos hechos delictivos. Tiene, usted, la oportunidad de marcar la diferencia entre el resto de sus colegas que tienen abandonados a los caraqueños.
Los dos
casos merecen atención e investigación. El caso de la señora Laura resulta muy grave por el uso
de Burundanga. A partir de ese hecho, cualquier persona -que camine por Santa
Fe- corre peligro hasta de llevar a un delincuente a su casa. Yo estoy en el deber de informar, no de ocultar una
verdad que nos perjudica. El estado, que
presentó esta señora, era preocupante. No obstante, no se le dio importancia. Los que estaban en el deber de pronunciarse, no lo hicieron. ¿Y si a la señora le hubiera pasado algo más grave debido a la Burundanga? No se debe esperar a que haya un muerto para alzar la voz. Drogar a una persona, es un delito. La persona queda a merced de su victimario y cualquier cosa puede pasar.
A la
señora Laura la robaron dos mujeres. Actuaron teniendo gente al lado porque, ese kiosco, se divide en
tres locales y, en los tres, estaban los dueños. Además, el hecho ocurrió a eso
de las 11:00 hs. Dicen que en Santa Fe hay grupos de seguridad vecinal. Se dicen tantas cosas...
La impunidad es cómplice del delincuente. Dos robos -en un mes y en una misma zona- son motivo de mucha preocupación. No hay delitos grandes y delitos pequeños. Hay delitos, ¡y punto!
Mucha gente minimiza lo sucedido y lo ven como un delito menor, cosas que le pasan “a otros”. Si permitimos que esto se convierta en costumbre, recuerde, usted, que “La costumbre se convierte en ley”. No queremos que en Santa Fe impere el delito como ocurre en otras zonas de Caracas. Quererse a sí mismos es luchar por calidad de vida. ¡No al conformismo caraqueño! ¡No al conformismo santafesino! Así no se construye un país de primera. Esa actitud es propia del tercermundismo.
Yo sí asumo mi cuota de culpa porque mi deber era publicar, esta carta abierta, en el mismo momento en el que me enteré de lo sucedido y no lo hice. Pido disculpas -a usted y a la comunidad- por eso.
Al margen del contenido de esta carta, una cosa, sí le digo: usted ha hecho una labor cultural muy buena. Ha marcado un antes y un después. Que todo hay que decirlo.
Quedo en espera de una respuesta
Cito, textualmente, el artículo de nuestra Constitución al que me acojo
Artículo 51 Toda persona tiene el derecho de representar o dirigir peticiones ante cualquier autoridad, funcionario público o funcionaria pública sobre los asuntos que sean de la competencia de éstos o éstas, y de obtener oportuna y adecuada respuesta. Quienes violen este derecho serán sancionados o sancionadas conforme a la ley, pudiendo ser destituidos o destituidas del cargo respectivo.
Carmen Guédez-Da Silva
CI 4.059.799
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